Trastornos Ansiosos

Posiblemente llegasta a esta página porque:

  • Te sientes inquieto, nervioso o preocupado la mayor parte del tiempo, o experimentas episodios de pánico repentinos.

  • Tienes síntomas físicos (como problemas gastrointestinales, tensión muscular, dolores de cabeza, sudoración, temblores, palpitaciones) que no pueden ser atribuídos a otra condición médica.

  • No logras descansar lo suficiente a causa de dificultades para conciliar o mantener el sueño.

  • Te sientes constantemente alerta o con temor a que suceda algo malo.

  • Fácilmente te asustas o te sientes atrapado o amenazado en situaciones que comúnmente no evocan esas respuestas.

  • Tienes dificultades para concentrarte o pensar con claridad a un punto que interfiere con tus actividades o relaciones.

Sea como sea que llegaste hasta aquí, me alegra que lo hicieras. Continúa leyendo para ver si mi trabajo con trastornos ansiosos podría ayudarte.

La ansiedad es parte normal de la vida. Es una respuesta natural frente a situaciones estresantes que nos advierte que hay peligro y nos prepara para luchar o huir. Sin embargo, una ansiedad agobiante, inesperada o constante probablemente indique que es necesario el apoyo de un profesional.

Es posible que debido a una ansiedad excesiva o impredecible:

  • Te sientas exhausto física, mental o emocionalmente.

  • Evites personas, situaciones o lugares por temor a que gatillen tu ansiedad, incluso si desenvolverte con/en ellos es necesario (ej. salir de casa para un trámite importante) o está alineado con tus metas (ej. dar una presentación en el trabajo para avanzar en tu carrera).

  • Recurras a comportamientos que te alivian en el momento (ej. comer, consumir alcohol, ver películas/series, salir de compras, etc.) pero que luego te llevan a frustrarte o decepcionarte contigo mismo.

  • Te irrites fácilmente con tu familia, amigos o colegas, lo que lleva a discusiones o distancia indeseadas en tus relaciones.

  • Sientas que no puedes disfrutar de tu vida y te preguntes si las cosas estarán siempre así de cuesta arriba.

Si te sientes identificado, probablemente necesites un espacio para explorar tus temores y cultivar la serenidad y el valor para hacerles frente.

Creo que puedes ser más valiente de lo que piensas y juntos podemos trabajar para:

  • Mejorar tu capacidad para relajarte y disminuir la tensión física y mental.

  • Desarrollar habilidades para afrontar situaciones temidas y manejar tus síntomas.

  • Reconocer y modificar conductas que alimentan tu ansiedad y te mantienen preocupado, nervioso o asustado.

  • Identificar las creencias que te llevan a mirar la vida con preocupación y contrarrestarlas con pensamientos realistas que te alienten y fomenten la autoconfianza.

  • Renovar un sentido de propósito que te motive a alcanzar tu potencial durante y después de la psicoterapia.

Si este es el tipo de ayuda que has querido encontrar…